"Me encanta el cuadro, ¿tiene certificado de autenticidad?"

El tema de los certificados en las obras de arte empieza a ser algo curioso. De un tiempo a esta parte se ha vuelto imprescindible, cuanto más valor tiene la obra más imprescindible.
La autenticación de una pieza tiene distintas lecturas y distintos protagonistas.
Por un lado, las fundaciones, hay algunas que han dejado de autentificar obras de un autor, se den las circunstancias que se den, como es el caso de la que lleva el Estate de Andy Warhol, y por otro aquellas que todavía lo hacen.
En el caso de las primeras, si tienes la suerte de que el cuadro que estás gestionando, que quieres vender, fue autentificado en su día o aparece en algún catálogo acreditado de la época, desde luego se te ha aparecido la virgen porque en caso contrario la venta se complica enormemente.
También existen fundaciones creadas para administrar, en el más amplio sentido de la palabra, el legado de un autor, que lo hacen a través de un comité, como es el caso del Comité Marc Chagall. Y, por último las fundaciones con un director al frente que es quien firma el certificado y lo autoriza.
Por otro lado, existen los expertos autorizados en autentificar las obras de un determinado autor.
Es un tema curioso, cuanto más antigua es la obra, peor. Resulta que esos expertos van desapareciendo por el lógico devenir del tiempo y son sustituidos por otros. Y ahí comienzan los posibles problemas, muchos de los expertos herederos no dan por válido cualquier certificado emitido por su antecesor, es más, certifican como falsos cuadros con certificaciones por expertos anteriores y/o, lo que es peor, cuadros certificados por el mismo autor!
Total, que si quieres vender un cuadro que necesita certificado para ello (en general todos, pero cuanto más antiguo o más valioso, con más razón), después de tener que enviar la obra, y fotos en alta resolución, hacer una investigación sobre su historia, y pagar las tasas oportunas, tienes que ponerte a rezar porque el próximo experto/fundación certificador no le de por decir que el tu obra es falsa porque como así sea, o resucita el pintor para confirmar que pintó o esculpió la pieza o lo tienes muy difícil.
Es una cosa de locos.
Porque, si nos paramos a pensar, en una época en la que las últimas tecnologías nos sorprenden a diario, y en la que todo el mundo tiene cierta psicosis por las obras de arte falsas, ¿no será mucho más sencillo falsificar un certificado que una obra?
Yo, por el momento, voy a ver si averiguo como funciona bien este tema y para ello quiero leer un libro que acabo de encontrar y que os recomiendo si os interesa el tema:

Autoría, autentificación y falsificación de las obras de arte
Editado por Lluís Peñuelas i Reixach
Ediciones Polígrafa para la Fundación Gala-Salvador Dalí

Un beso para todos!!

Claro que hay coleccionistas en España!

¿Porqué somos tan críticos con nosotros mismos y tan halagadores con los demás?
He leído varios artículos últimamente, tanto sobre papel como online, criticando el estado del mercado del arte en España y hablando de los pocos coleccionistas que tenemos en este país (no diré donde se publicaron, suficiente con saber que así ha sido).
No estoy de acuerdo en absoluto. Creo que dentro de la mayoría de los españoles hay un pequeño coleccionista de arte, o alguna vez habéis visto una casa que no tenga nada colgado en sus paredes? Bien sea comprando en grandes superficies, almacenes, el rastro, las galerías o cualquier feria, todos adquirimos cuadros y esculturas aquí y allá. Muchos de nosotros empezamos a interesarnos por algún artista, vamos educándonos en el bello arte de la pintura, distinguimos entre lo que nos gusta y lo que no ...
Eso a pequeña escala. A gran escala exactamente igual. España está lleno de grandísimos coleccionistas que están comprando arte, dentro y fuera de nuestras fronteras.
¿Porqué en el extranjero? bien por fiabilidad, bien por la escasez de buenas obras en el mercado interno, bien por snobismo, bien por consejo de comunicadores, por relevancia de las ferias, por una cuestión de impuestos, por la razón que sea así está ocurriendo.
Y, ¿quien puede arreglar esta situación?, todos los agentes implicados: galerías, asesores, museos, estado, todos aquellos que tienen algún interés comprometido.
No es sencillo puesto que estamos todavía tratando de salir de una situación que nos ha dejado a todos exhaustos en recursos y esfuerzos, pero es imprescindible.
Las galerías debemos tratar de aumentar la calidad de las obras que exponemos; los asesores deberían seguir un criterio coherente que aúne modas con defensa de nuestros artistas; los museos con programaciones que impliquen mayoritariamente artistas nacionales; el estado, obviamente con un programa serio de difusión nacional e internacional (de bajar los impuestos o la ley de mecenazgo ni hablamos), etc.
Todo esto debería ser analizado con detenimiento, cada punto mencionado podría ser ampliado y discutido largamente.
Pero aún así, debemos de estar orgullosos, hemos pasado unos tiempos terribles y hemos plantado cara a la situación. Los galeristas hemos participado en ferias extranjeras más que nunca; los asesores hemos viajado a buscar las obras de arte internacionales que nuestros clientes nos solicitaban; los museos nacionales (el MNCARS sin ir más lejos) tienen una programación más arriesgada que muchos internacionales; incluso algunos coleccionistas han seguido comprando obras de arte a pesar de los tiempos.
Frente a todo esto, yo me pregunto, todos aquellos que se dedican a criticar el mercado de arte en España, en qué se basan?, o más bien, con qué país nos comparan? Sí realmente han dedicado un tiempo a pasear por las galerías de Londres, de Nueva York, Miami, París, Hong Kong, etc., se habrán dado cuenta de que el nivel de calidad de las obras en general está bastante descuidado. Eso sí, si nos basamos en las ventas de las grandes casas de subastas o las cuatro galerías internacionales de relevancia (con sucursales en las mismas ciudades), estamos hablando de un submundo que no pertenece a ningún sitio, donde compran coleccionistas de cualquier lugar del planeta y, además, siempre compran lo mismo. Me cuesta creer que en Reino Unido hay más y mejores coleccionistas británicos que en España españoles.
En fin, todo un tema para meditar y, por supuesto, para pasar a la acción!

Ferias de arte 2014 ... sin novedad en el frente!

Otro año más, Arco y sus satélites, Art Madrid y Just Mad fundamentalmente nos sorprenden con que no hay sorpresa.
El ambiente es el mismo, cada una sigue su línea de los últimos años, todas incorporando un toque de la de al lado, no vaya a ser que se escape algún cliente!
Carlos Urroz hace un par de años, o ya son tres?, que dirige ARCO y con él se terminaba la feria de expositores atrevidos, piezas de mal gusto, o artistas políticamente incorrectos. Parecía que llegaban tiempos un poco más tranquilos y aunque se atisbaba en el horizonte un halo de conservadurismo, por lo menos se entendía que la calidad por fin primaría ante el espectáculo y el buen gusto ante lo grotesco. Bueno, podríamos decir que así ha sido pero empieza a ser un poco demasiado comedido. Nada rompe con la estética establecida, nada resulta histriónico, o agresivo. Es más, Arco empieza a parecerse a muchas otras ferias internacionales, consiguiendo entre todas una curiosa sensación de entumecimiento del mundo del arte. Mantiene algunas galerías de las de siempre para que la calidad no desmerezca, vanguardias históricas que sostienen gran parte de lo que vino después.
La crisis nos ha vuelto o nos ha devuelto conservadores. El arte español que se ha puesto siempre la vanguardia por bandera, este país de artistas valientes y arriesgados se amilana y doblega ante lo fácil y manido. Necesitamos un revulsivo, algo que nos haga despertar de este letargo. He paseado por las ferias estos días y no recuerdo una sola pieza que me haya hecho levantar las cejas.
El enfermo se encuentra estable dentro de la gravedad.

Mujeres, hombre, ... ¿personas?

No suelo entrar en disquisiciones sobre el feminismo y el machismo, a estas alturas me parece un anacronismo. De hecho, no me gusta posicionarme en ningún asunto que afecte a un segmento concreto de la sociedad, del tipo o la razón que fuere, por lo menos públicamente.
Las mujeres en el mundo del arte como punto de partida para la agenda de toda una semana.
Festivales, exposiciones, conferencias, todo tipo de eventos para ensalzar sus cualidades como artistas. Críticos, cronistas, blogeros, directoras de festivales incluso, comentan como cada año este acontecimiento tiene mayor acogida. Cada edición son más las galerías que participan y las artistas representadas. A nadie se le ha ocurrido pensar que es simplemente con el afán de conseguir salvar el negocio?
A veces creo que la humanidad es muy lenta en sus reacciones, las mujeres artistas infravaloradas respecto a los hombres? pero si es que no se sostiene el argumento de ninguna manera.
Galerías punteras en nuestro país como Helga de Alvear, Nieves Fernández o Elvira González conducidas hace años por mujeres, incluso por sus hijas; María García Yelo es directora adjunta de Photoespaña; Pilar Citoler, no necesita presentación; Julieta Rafecas, etc.,; y las artistas, cómo no, Cristina Iglesias o Tacita Dean, por Dios!
El mundo del arte está lleno de grandes mujeres cuyas obras hablan por sí solas.
En serio, avancemos, superemos tabúes que nos anclan al pasado. Se pasaron los tiempos en los que necesitábamos seudónimos para poder presentar nuestras creaciones como tuvo que hacer George Sand (Amantine Lucile Dupin). Hoy triunfa la calidad.
Seamos creativos, inventemos alguna otra razón para confeccionar los calendarios artísticos.
Presentadme un buen artista y no me fijaré en su nombre, en su ropa, en su color de piel, en su sexo o en el idioma que habla, caeré rendida ante el reflejo de su alma sobre su obra ...

A la velocidad de la fibra óptica

Ufff, me ha costado un montón habilitar el blog. Misterios de la tecnología, de repente no era capaz de publicar. Solucionado. Aquí estoy de nuevo. Y tengo muuuuuchas cosas que contaros.
De repente me he parado a pensar. Incluso escribirlo suena raro, ¿parado?, ¿cuánto tiempo hace que no paro?, no lo recuerdo.

El mundo es otro, el mundo cambia cada segundo y, consecuentemente, el mundo del arte también lo ha hecho.

Estamos inmersos en la era de las nuevas tecnologías, redes sociales y demás inventos que han provocado un aceleramiento brutal de la vida en general. Cualquier “gadget” (aparatito, para los de antes) se queda obsoleto según lo estás pagando; si cliqueas en el “refresh” la información se actualiza al segundo (la flechita redonda que refresca la página donde estás navegando por internet); podemos saber cualquier programa, cultural, mínimo a un año vista, de la mayoría de entidades culturales internacionales del tipo que sea; qué queréis que os diga, da vértigo.

En un mundo que rueda a esa velocidad, aparte de abrocharnos el cinturón de seguridad, no queda otra que adaptarse y avanzar con él.

A veces uno no sabe ni cómo reaccionar. Al principio empiezas a correr a la velocidad de la fibra óptica pero francamente es agotador y bastante caótico. Porque ya no es suficiente con volverse loco tratando de averiguar cómo darle la vuelta a la situación económica para conseguir vender un peine y mantenerte a flote, nooo, qué va!, ahora hay que tener el tiempo de diseñar y llevar a cabo el programa de tu galería, por supuesto siguiendo eso que ahora llaman “tendencias”, además de aprender tan rápido como seas capaz cómo funcionan las redes sociales y demás plataformas que para cuando quieres darte cuenta se han multiplicado por mil, por todos los santos, cuántos iconos pueden aparecer por minuto a la hora de seguir algún blog, post, web, etc.? Y no se acaba ahí, además tienes que manejar el gestor de tu web y tenerla actualizada, estar al día con los últimos blogs y leer los más interesantes (selección que debes de saber hacer naturalmente, cómo no?), junto a abrir negocio en el extranjero, visitar exposiciones, participar en ferias, estar a la última en arte contemporáneo y, por supuesto, tener siempre un aspecto absolutamente radiante. Ah! Y además sería perfecto tratar de tener una vida privada que vaya un poco más allá de la actividad en el gimnasio (también ineludible para estar al día!) … ufff, un momento, calma!

No queda otra que, después de atravesar esa etapa de locura en que te crees que puedes hacerlo todo, porqué no?, empiezas a pensar que mejor tomarse las cosas con un poco de tranquilidad, pensar bien a qué dedicar tu tiempo y optimizar las opciones.

Y de alguna manera lo mismo le está pasando al mundo del arte. Está empezando a asimilar los cambios y adaptarse a ellos en todas sus facetas. Vayamos por parte, iremos analizando cada detalle. Espero tener vuestra compañía en un viaje por este nuevo mundo!!!

A favor

Muy buenas tardes de viernes a todos, con la esperanza de que disfrutéis de un delicioso fin de semana en el que hagáis lo que realmente os gusta! Yo, como dice mi amigo Vicente, voy a intentarlo "por todos los medios".
Entramos en el final de la temporada. Sí, ya sé que estamos en Abril y que todavía quedan unos meses hasta las vacaciones de verano, peeero, peeero, igual de cierto es que estamos a un par de exposiciones de terminar el "curso".
Como las cosas mejoran muy poco a poco, las gentes parecen desperezarse tras un largo letargo y los aires primaverales reviven nuestros ánimos, creo que lo mejor que podemos hacer es simplemente posicionarnos a favor.
Muchas son las opciones para disfrutar en los próximos meses y eso no debe por menos de alegrarnos los corazones. Alguna feria nacional como Art Maestros que se estrena y está a punto de caramelo, Photoespaña con un programa muuy apetecible, excelentes exposiciones en Madrid, la feria del libro! aaaahhhh, y lo más importante, tenemos web nueva!!! así que también podéis disfrutar de nuestra propuesta en www.artepaso.com
Así que desde ya declarémonos a favor, a favor de escuchar con paciencia a nuestros hijos, a la suegra o a nuestro querido vecino, a favor de hacer esa horita extra que nos exige el trabajo, a favor de disfrutar lo bueno que tiene la vida que es de por sí un regalazo, a favor de la situación que sin duda tiene que mejorar, a favor de cada día, de cada persona, de cada gesto, de cada intención. A favor.

Yo apuesto por latinoamérica y tú, qué dices?

Hoy he leído un muy buen artículo que me pasa un buen amigo sobre pintura latinoamericana. Al final os adjunto el link por si os apetece leerlo, es muy interesante.
Aporta datos de precios, de resultados en subastas y todo ese tipo de información. Pero comentaba algo que me ha llamado la atención y que me hace confiar en que el arte de esos grandes países de América del Sur va a ocupar un lugar de gran relevancia en los próximos años.
De más está deciros que grandes museos de Europa ya tienen comisarios, departamentos, etc. especializados en este tema. En las ferias internacionales los participantes latinoamericanos cada día son más y su calidad y su prestigio aumenta progresivamente.
En fin, no me quiero desviar. La noticia que os citaba, comentaba como se puede observar un claro crecimiento de los resultados en las últimas subastas pero lo que me llamaba la atención, lo que me ha sorprendido ha sido que hablaba de un crecimiento lento y progresivo; reconoce que los autores son desconocidos y sus obras están infravaloradas!
A primera vista puede parecer algo insignificante pero yo creo que es la condición más necesaria para crear un mercado sólido y, sobre todo, duradero en el tiempo.
Los coleccionistas empiezan a preguntar por nombres que hasta hace poco no figuraban en las invitaciones a las exposiciones de pintura latinoamericana. Surgen simposiums, cursos, muestras, mesas redondas, conferencias, todo tipo de eventos relacionadas con ella.
Y, sin embargo o a pesar de todo, no podemos decir que es una moda, la calidad de los artistas, de su trabajo es tan indiscutible que todo esto no hace más que dar fé de una realidad, la pintura de nuestros hermanos americanos es un enorme tesoro de la humanidad por descubrir.
Yo empiezo a profundizar en ella hoy mismo y os invito a descubrirla, compartirla y difundirla.
Hace poco comentaba todo esto con una profesional venezolana que está comenzando un importante proyecto en Madrid, y casi sin querer me di cuenta de algo que tiene esa pintura, quizá sea lo que la une a la nuestra, y que hace de ella algo irresistible, a lo que antes o después no puedes dejar de acercarte con la atracción de un imán: tiene corazón.
En cada obra, en su composición, en su técnica, en sus colores se siente la pasión, el sabor, la piel, la vida, el sol, el dramatismo, las risas, el calor y el color de la sangre latina, de eso que nos hace tan salvajes y tan deseados a todos los latinos -y perdonad que me tome la licencia de incluirnos entre ellos, pero así lo siento.
Hay en ella una verdad tan humana que acaba por conquistar el corazón de cualquier amante del arte.
Y no queda más que entregarse al placer de disfrutarla.

http://blouinartinfo.com/news/story/804750/the-curious-case-of-the-latin-american-art-market-low-volatility-undervalued-stars-and-tenacious-collectors